Al iniciar este nuevo año elevamos, con esperanza, nuestra oración a Jesús por nuestro mundo, especialmente, por los que sufren los estragos de la pandemia y por aquellos que dan su vida por cuidar a los demás. Pedimos para que Dios siga suscitando corazones generosos que entreguen su vida por el cuidado de todos. Al pie de la cruz, signo de entrega y vida, contemplamos la Caridad de Cristo que cada día nos apremia.
Equipo Interprovincial de Pastoral Vocacional. Hijas de la Caridad-Misioneros Paúles. España.