Bienvenida/o a este momento de encuentro con la fuerza que nos anima, que nos impulsa a vivir en plenitud. Esta es la primera oración que te proponemos para acompañarte en este tiempo de espera, es tiempo de despertar, de vivir con el corazón encendido. Ponte cómoda/o, y respira … este es un momento para encontrarte con ellos, te sugiero que puedas preparar tu espacio…, busca un momento tranquilo, en calma…enciende una velita y concéntrate en su luz, este momento es para ti, para iluminarte en este domingo para agradecer y acompañar a María…respira hondo, sonríe y disfrútalo, estamos a la espera…
Respira profundo y repite esta frase-oración:
«Cuando todo parece apagado, Dios enciende una chispa. Cuando el alma se cansa, el Espíritu canta. Hoy, somos llamados a ser ese canto.»

Evangelio (Mt 24, 37-44)
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Cuando venga el Hijo del hombre, pasará como en tiempo de Noé. En los días antes del diluvio, la gente comía y bebía y se casaban los hombres y las mujeres tomaban esposo, hasta el día en que Noé entró en el arca; y cuando menos lo esperaban llegó el diluvio y se los llevó a todos; lo mismo sucederá cuando venga el Hijo del hombre: dos hombres estarán en el campo: a uno se lo llevarán y a otro lo dejarán; dos mujeres estarán moliendo, a una se la llevarán y a otra la dejarán. Por tanto, estad en vela, porque no sabéis qué día vendrá vuestro Señor. Comprended que si supiera el dueño de casa a qué hora de la noche viene el ladrón, estaría en vela y no dejaría que abrieran un boquete en su casa. Por eso, estad también vosotros preparados, porque a la hora que menos penséis viene el Hijo del hombre».
¡Palabra del Señor! ¡Gloria a Ti, Señor Jesús!
Para la reflexión personal
«Estad en vela». Son palabras que invitan a despertar y a vivir con más lucidez, sin dejarnos arrastrar y modelar pasivamente por cuanto se impone en esta sociedad. Tal vez esto es lo primero. Reaccionar y mantener despierta la resistencia y la rebeldía. Atrevernos a ser diferentes. No actuar como todo el mundo. No identificarnos con lo inhumano de esta sociedad.
Nos han de animar dos convicciones. La persona no ha perdido su capacidad de ser más humana y de organizar una sociedad más digna. Por otra parte, el Espíritu de Dios sigue actuando en la historia y en el corazón de cada persona. Es posible cambiar el rumbo equivocado que lleva esta sociedad. Lo que se necesita es que cada vez haya más personas lúcidas que se atrevan a introducir sensatez en medio de tanta locura, sentido moral en medio de tanto vacío ético, calor humano y solidaridad en el interior de tanto pragmatismo sin corazón. (José Antonio Pagola)
CANCIÓN: “Despiértame” (Ixcis).
Oración final
Al inicio del Adviento
Por un Adviento que sea
más que un calendario,
un pasar de domingos
y encender velas.
Por un Adviento de mirada
renovada, sobre mí,
sobre ti, sobre el mundo
y sobre Dios.
Por un Adviento de mirar,
de mirar mucho.
De mirar donde nadie mira
o donde nunca mirabas.
Porque la mirada mata o salva,
desprecia o reconcilia,
tensa o suaviza,
juzga o perdona.
Óscar Cala, SJ
Amén
Por gentileza de: misevi.es







