DÍA 22: LA PALABRA DE DIOS

Hoy el Señor te invita a detenerte y escuchar. Su Palabra no es letra muerta, sino vida que transformaluz que guíaalimento que fortalece. Como misionero/aa, estás llamado/aa a beber cada día de la fuente del Evangelio, para anunciar con verdad y vivir con coherencia.

Respira profundo y repite esta frase-oración:

“Señor, que tu Palabra sea lámpara para mis pasos y fuego en mi corazón.”

Evangelio del día: 2 Timoteo 3, 16-17

“Toda Escritura es inspirada por Dios y útil para enseñar, para argüir, para corregir y para educar en la justicia; así el hombre de Dios se encuentra perfecto y preparado para toda obra buena.”

¡Palabra del Señor! ¡Gloria a Ti, Señor Jesús!

Enseñanzas de San Vicente de Paúl

No hay nada más poderoso que la Palabra de Dios cuando se recibe con humildad y se pone en práctica con amor. Ella es la semilla que transforma el mundo».

Para la reflexión personal

San Pablo nos recuerda que toda Escritura es inspirada por Dios y útil para formar, corregir, educar. La Palabra no es solo para leerla, sino para dejarse leer por ella, para que transforme el corazón y prepare al misionero/a para toda obra buena.

San Vicente nos enseña que la Sagrada Escritura es la gran maestra del seguimiento de Cristo. En ella encontramos el llamado a renunciar a nosotros/as mismos/as, a tomar la cruz, a seguir al Maestro con fidelidad.

La oración vicenciana es una súplica por fidelidad al Evangelio. No basta con conocerlo, hay que vivirlo, anunciarlo, encarnarlo. La Palabra es la brújula del misionero/a, su fuerza en el camino, su consuelo en la dificultad.

¿Qué lugar ocupa la Palabra de Dios en mi vida diaria?

¿Qué pasaje del Evangelio me ha marcado últimamente?

¿Cómo puedo ser testigo vivo de la Palabra en mi misión?

Oración final

Señor,
tú eres sabiduría y guía eterna.
Nos diste el Evangelio como camino de vida.
Ayúdanos a ser fieles a tus enseñanzas,
sin desviarnos ni olvidarlas,
hasta el último día.

Amén.

Gentileza de: Misevi España